lunes, 27 de agosto de 2012

Alistair Urquhart

 Veréis, es un nombre curioso. Un nombre que no se olvida con facilidad. Hace ya un par de años leí su historia en un periódico. El hombre sacaba un libro donde contaba sus andanzas durante la segunda guerra mundial. Quien me conoce bien sabe que me gusta la historia bélica, siendo la I Guerra Mundial mi preferida.  De hecho, y será por lo saturado que está el cine de historias de la II Guerra Mundial,  me parece un poco tediosa. He perdido la capacidad de sorprenderme  con las historias de Normandía, Stalingrado o la campaña de Italia.
 No obstante, empecé a leer aquel articulo y me enganchó. Lo hizo tanto que desde ese momento he estado buscando el libro de este hombre sin lograr encontrarlo(en castellano)

 Alistair Urquahart es un escocés que nació en 1919 y que sirvió en la segunda Guerra Mundial con el regimiento de infantería Gordon Hihglander. Contaba, Alistair, que no quiere dormir. Desde hace casi 70 años no le gusta dormir; por eso ahora, postrado en una silla de ruedas, trata de hacer cualquier cosa para no quedarse dormido.

 Después de la guerra, como muchos otros(lo hemos visto en películas y leído en libros) retomó su vida. Se casó, tuvo hijos y nunca contó nada de todo lo que había vivido. Su tormento llegaba con la noche y nunca contó las verdaderas razones. Se las quedó para sí, hasta ahora, en donde viendo el final más cerca,  y con su mujer fallecida, decidió escribir un libro " The forgotten highlander" para explicar su tormento. Cuentan que sus hijos no pudieron acabar de leerlo.

 Las verdaderas razones de sus pesadillas eran los casi 4 años que pasó prisionero en manos de los japoneses. Las historias que relata dejan en cuento infantil al "Puente sobre el río Kwait" o "Feliz Navidad Mr Lawrence" (ambas, películas muy recomendables)

 Cuando Alistair fue reclutado por el regimiento de infantería escocés, contaba con 20 años, y fue enviado al frente en Singapur. Cuando esto sucedió, en el año 1940, Singapur era un destino envidiable. La colonia británica era un paraíso alejado de la batalla. Sin embargo, en 1942, el ejercito imperial japonés invadió la isla. Más de medio millar de miembros del batallón fueron apresados. Alistair fue uno de ellos.
 El primer circulo del infierno para Alistair empezó allí mismo. 300 personas  que estaban en el hospital en el momento de la invasión fueron ejecutadas sin piedad. Los apresados, hacinados como ganado en uno vagones, marcharon desconociendo su destino.

 Según cuenta, en los vagones de aquel tren, los soldados no podían sentarse, a penas podían respirar y la sed les atacaba sin piedad. Hacían sus necesidades unos encima de otros y una buena parte de los presos padecía enfermedades como la malaria, disentería o diarrea. Una semana en aquel vagón, sin comer ni beber. Muchos murieron.

 Llegaron a su destino: la selva tailandesa. Aun así, nada más bajar del tren, tuvieron que caminar casi 200 km para llegar al campamento donde iban a malvivir. En esa travesía, de más de 30horas, pasaron a través de los cadáveres mutilados y descompuestos de los soldados chinos, victimas de la terrible masacre de Sook y Ching(el famoso escuadrón 731 del ejercito japonés, del que seguramente haré un post a parte)

"Padecía disentería y malaria y no había medicamentos. Si tenías una camiseta eras afortunado. Si tenías un gorro eras extraordinariamente afortunado"

 Cuenta que cuando un soldado se caía al suelo, sin fuerzas, los soldados les pegaban con látigos de bambú, si eran afortunados, si no lo eran, les clavaban la bayoneta en el pecho. Los cortes con bambú producían úlceras muy graves que derivaban en gangrena. Si esto pasaba, los japoneses amputaban. Sin anestesia.

 Sobre las heridas, los soldados, se ponían gusanos  "Notabas como te comían la carne"  pero les libraban de infecciones. En los casi 4 años que pasó en aquel campo, no se aseó ni una sola vez. La higiene no existía. Y la comida se limitaba a un poco de arroz cada 3 o 4 días.

 El campamento estaba diseñado para 4.000 personas, no obstante, era 50.000 los que se agolpaban allí. Los prisioneros eran esclavos que trabajaban en el ferrocarril de la muerte, el infame puente que pasó a la historia por la película de Alec Guiness. Un puente que unía Birmania y Siam.





 Sin embargo, Alistair  dice que la película no refleja la verdad de aquella terrible construcción, a la que no duda en calificar como un crimen contra la humanidad. "Moría un hombre por cada traviesa que se colocaba y los culatazos de rifle y latigazos sin sentido, estaban a la orden del día". Los datos no engañan: 16.000 británicos murieron en su construcción pero son pocos comparados con los 100.000 nativos que dejaron sus vida. La construcción de aquel puente, luego destruido por los americanos, fue una locura. Alistair admite que cuando los guardias no miraban, metían termitas en la madera para que cuando pasara el primer tren, se viniera a bajo.

Usuki era el jefe del campamento. Era el hombre al cargo. " Un bastardo sádico para el que no eramos más que escoria" El príncipe negro. Su mano derecha era un general bajito y rechoncho de nombre Okada, al que apodaban Dr.Muerte. Torturaba constantemente a los presos, sin razón. Su práctica preferida era la del agua: Tumbar boca abajo al reo e introducirle una manguera con agua por la boca.Los sujetaban con fuerza. El estómago se les hinchaba y entonces Okada saltaba "alegremente" sobre ellos.La mayoría murieron.

 Otra tortura típica(ésta si la he visto en alguna película) era crucificar a los reos, atándolos con bambú mojado por muñecas y tobillos. Cuando las hojas de bambú se secaban se convertían en cuchillas que iban cortando poco a poco la piel, hasta llegar a dejar a la vista músculos y tendones. "Los dejaban agonizando día y noche. Hasta los más fuertes gritaban como locos"

Otro de los peores recuerdos de Alistair, se remonta al momento en el que un compañero trató de escapar y fue capturado. Durante días lo apalearon sin piedad y luego, delante de todos los presos, el príncipe negro vestido de gala y con su espada samurai, le cortó la cabeza.

 Alistair cuenta que durante el tiempo que estuvo preso, trató de pasar desapercibido, no obstante, en una ocasión, tras un retortijones insoportables, salió a una letrina en medio de la noche. Un guardia trató de violarle. Alistair le dio una patada en la entrepierna y escapó. Pero el grito del guardia alertó a todos. El mismísimo Príncipe Negro se personó allí. Tambaleándose, Alistair le contó lo sucedido. Lo golpearon y apalearon. Luego lo metieron en un hoyo donde no podía ni sentarse ni ponerse de pie, y lo tuvieron allí 7 días.  Lo único que le daban era un cucharon de agua, por la cabeza,al día.

 Pensar en suicidarse era lo más común en aquellos días. Según cuenta, en un momento de su reclusión, pasó  6 meses en el hospital. Padecía de disentería, malaria y beriberi, cuando fue abatido por el cólera.

 Saliendo del hospital lo metieron en otro vagón con destino a Singapur y desde allí a NAGASAKI.

Según cuenta, en el viaje en barco hacia la ciudad japonesa, presenció el nivel más bajo al que puede llegar el ser humano.

 Allí se bebían la orina de los presos, con la desesperación, algunos comenzaron a beber la sangre de otros y finalmente optaron por el canibalismo.El hombre que caía enfermo estaba perdido: lo mataban a pisotones. A la semana de estar en ese infierno, un submarino aliado les torpedeó. El barco se hundió y Alistair, según propias palabras salió "despedido como un corcho en una botella de champán entre las llamas". Se agarró a una balsa y sobrevivió durante días al abrasador sol, hasta que un ballenero lo encontró medio muerto, y lo trasladaron a un campo de prisioneros a 10km de Nagasaki.

 El 9 de Agosto de 1945, Alistair dice "Oír un ruido desagradable y ver una luz cegadora. Salí volando y choque contra los dos lados de la pared. Después supe que habían lanzado LA BOMBA"

Consecuencia de aquello, padeció cáncer de piel y artritis.

 Después de aquello pudo volver a su vida, la cual retomó como electricista.  Dicen que las productoras de cine quieren hacerse con los derechos del libro, pero que él quiere garantías de que se traslade todo, tal  y como él lo vivió. Eso parece difícil.

Hoy tiene 92 años.

1 comentario:

Paiaso de Asalto dijo...

Sobreviviu a Nagasaki e chegou aos 92 anos. É un superheroe, mutou fixo.

Que chungo, creo que non quero nin ler a película nin ver o libro... se o graban :)